(el holocausto de El Palacio de Justicia)
23 años después
Hay fuegos chiquitos que nunca se apagan
hay fuegos que mientras menos los ves más queman
hay fuegos en la memoria que hacen humo la amnesia
23 años después
las llamas no son ceniza todavia
aunque sople el viento del olvido
23 años después
la voz de los desaparecidos se escucha
sobre los himnos de guerra
no cesó la horrible noche
23 años después
el Palacio sigue ardiendo
en el corazón
Cuando estaba pequeño me hacían tomar un polvo asqueroso que se llamaba COLA GRANULADA y una pastillas de dudosa procedencia de nombre TRICORTÍN.
ResponderBorrar"Tómeselo mijo que eso es muy bueno para la memoria" me decía mi mamá.
Y yo me los tomaba.
Tengo en la retina las imágenes de las llamas consumiendo el Palacio de Justicia, del rocket fusilando la fachada, de los militares sacando sobrevivientes que luego supimos, dejarían de serlo al poco tiempo.
Gracias por ser hoy mi Tricortín.
Y seguirán ardiendo… como tantas otras llamas muertas en este país
ResponderBorrarUn holocausto peor incluso que cualquier otra mentira semita contada al mejor postor...
ResponderBorrar"La lucha del hombre contra el poder es la lucha de la memoria contra el olvido"
Kundera
ojala perdure en la memoria.